La interoperabilidad de los pagos móviles y la ausencia de esta función
2 de diciembre de 2020
En varios países del mundo, las expectativas regulatorias y los marcos legales del sector de pagos móviles aún no han sido definidos con precisión. Muchos proveedores de servicios de pagos móviles no cumplen con requisitos reglamentarios debidamente definidos, los usuarios finales no tienen demasiada confianza en la seguridad de las transacciones de pagos móviles y en varios países a nivel mundial se está interrumpiendo el desarrollo de tales servicios.
Evidentemente, la obstrucción de la inclusión financiera no es casualidad. En la mayoría de los países, el efectivo debe considerarse un método de pago ideal y conveniente porque las condiciones para acceder a los pagos móviles y confiar en ellos aún no gozan de favorabilidad. Por lo tanto, los bancos centrales requieren una gestión y un control completos de las partes interesadas en los pagos móviles para garantizar la seguridad de los ciudadanos con y sin servicios bancarios.
Con este fin, y antes del surgimiento de las tecnologías de pagos móviles, ProgressSoft Corporation anticipó la necesidad de un conmutador interoperable móvil nacional para que los bancos centrales gestionaran a todas las partes interesadas en el ciclo de pagos móviles. En 2008, ProgressSoft presentó al mundo su conmutador interoperable de pagos móviles, PS-mpClear, un conmutador de pagos móviles nacional que brinda a los bancos centrales capacidades de control del ecosistema de pagos móviles y promueve la inclusión financiera al permitir que los usuarios con y sin servicios bancarios puedan acceder al sistema financiero.
PS-mpClear procesa transacciones de pagos móviles entre bancos y entre procesadores y respalda el procesamiento y la conmutación de transacciones financieras y no financieras móviles en función del procesamiento directo. Promueve la inclusión financiera a través de la prestación de servicios de pago para usuarios que no tienen acceso a servicios bancarios, al tiempo que compensa y liquida las transacciones de pago en dinero de los bancos centrales.
Como solución centralizada de conmutación y compensación, PS-mpClear elimina la necesidad de acuerdos bilaterales entre proveedores de servicios de pagos móviles a fin de ofrecerles un sistema abierto e interoperable. Con una base de datos centralizada para todos los participantes autorizados en el sistema, los bancos centrales pueden utilizar una solución en tiempo real para supervisar la estabilidad financiera de los proveedores de servicios de pagos móviles y garantizar su solidez monetaria.
Implementado en 2014 por el Banco Central de Jordania, PS-mpClear ha posicionado con éxito al Reino de Jordania a la vanguardia de los esfuerzos de inclusión financiera a escala mundial. La solución ha cumplido las funciones reguladoras, de compensación y de cambio del Banco Central de Jordania, incluido el cambio y procesamiento de transacciones financieras únicas, la compensación de transacciones entre distintas instituciones financieras y la integración con el Sistema de Liquidación Bruta en Tiempo Real (LBTR, por sus siglas en inglés) del banco central. Hoy, el Banco Central de Jordania está monitoreando el flujo de caja y supervisando todas las transacciones de pagos móviles en el Reino, incluidos los micropagos. Además, está facultado para regular los pagos móviles, gestionar la estabilidad financiera de los proveedores de servicios de pago móvil y garantizar el cumplimiento de las regulaciones.
En 2017, se lanzó PS-mpClear en la Sultanía de Omán, lo que lo ayudó a alcanzar un logro más para los sistemas de pagos nacionales del Banco Central de Omán. El logro es la provisión de un mecanismo seguro e instantáneo de transferencia de fondos mediante el uso de dispositivos móviles. La nueva implementación logró accesibilidad, conveniencia y seguridad y, desde entonces, en la Sultanía se ha fomentado el uso más amplio de los pagos electrónicos.
Hoy en día, a medida que miles de millones de transacciones de pagos móviles se acercan a la marca del billón, una infraestructura de pagos móviles interoperable y debidamente definida ya no es simplemente un complemento de los sistemas de pagos de los bancos centrales, sino que es absolutamente esencial para potenciar los servicios de pagos móviles y facilitar los esfuerzos de inclusión financiera.